Desde muy antiguo, se calcula, por documentos y otras señales, que la devoción al Señor Nazareno está muy arraigada en el sentir religioso- devocional de nuestro pueblo, Rociana. Allá por el siglo XVII, lo señalan noticias escritas en documentos del Archivo Municipal, por motivos de pleitos habidos; quiere decir esto que la existencia de la Hermandad es muy anterior a las fechas de dichos documentos, probablemente del siglo XVI, como heredera de la devoción a la Santa Vera-Cruz, de donde arranca la mayoría de las hermandades de penitencia y la devoción popular a la Santa Cruz.
La imagen antigua del Señor Nazareno de nuestro pueblo, muy devota, que fue quemada una noche al principio de la Guerra Civil en Julio de 1.936, era una talla para vestir de tamaño menor que el natural, que muchos atribuían sin fundamento a Juan de Mesa, autor del Gran Poder de Sevilla, pues por sus características era de época anterior, de finales del siglo XV o principios del XVI, con facciones algo arcaizantes, propias de la época antes dicha. De pequeño tamaño con cabellera natural, con corona metálica, de plata, que se conserva en domicilio particular, todo recuerda al gótico tardío o al incipiente barroco, por tanto de Juan de Mesa no puede ser, porque este imaginero es del siglo XVII.
Desde principios del siglo XX hasta 1.936, la Cofradía de Ntro. Padre Jesús Nazareno realizaba su estación de penitencia el Viernes Santo. Como la Hermandad no tenía Virgen, el Cristo en su salida era acompañado independientemente por la Virgen de los Dolores, además de una imagen de San Juan Evangelista, que era custodiada por Dña. Josefina Montenegro Acosta.
Procesionaban en el siguiente orden: en primer lugar San Juan Evangelista en una pequeña parihuela, sin acompañamiento; en segundo lugar, tras la Cruz Parroquial con la manga de color negra y dos ciriales, la Virgen de los Dolores que procesionaba sobre un palio negro, siendo acompañada por hermanos y devotos con cirios. A continuación el paso del Señor, de pequeñas proporciones portaba la imagen del Nazareno, vestía túnica morada bordada en oro (túnica con la que hoy en día procesiona el Nazareno, tras pasar los bordados a un nuevo terciopelo), era acompañado por nazarenos con cirios y escoltado por dos parejas de la Guardia Civil de gala, con los fusiles para abajo y el tricornio puesto en la espalda. Tras el paso del Señor iban la autoridad eclesiástica y el Ayuntamiento, y cerrando el cortejo la Banda de Música Municipal.
Los pasos eran portados a hombros por cargadores (según testimonios de personas mayores).
Tras el paso de la Virgen iban la autoridad eclesiástica y el Ayuntamiento, y cerrando el cortejo la Banda de Música Municipal.
A principios de los años veinte, se fusionan la Hermandad del Santísimo Sacramento y la Cofradía de Ntro. Padre Jesús Nazareno en una sola, para beneficio y prosperidad de ambas corporaciones. Con esta refundación y fusión la Hermandad adquiere el carácter sacramental.
Debido a los acontecimientos de 1.936, desapareció la imagen de Ntro. Padre Jesús Nazareno que estaba en la Iglesia Parroquial de San Bartolomé Apóstol. La imagen del Nazareno se encontraba al culto en la capilla de la Hermandad, situada en la nave lateral izquierda, junto al Altar Mayor, en un magnífico retablo dorado
Tanto las Imágenes como los objetos de cultos, documentación, y casi todos los enseres son vandálicamente profanados y destrozados, hasta el punto de que arrastraron la imagen del Nazareno por la calle Sevilla.
Fuente: Revista Nazareno y Dolores
La imagen antigua del Señor Nazareno de nuestro pueblo, muy devota, que fue quemada una noche al principio de la Guerra Civil en Julio de 1.936, era una talla para vestir de tamaño menor que el natural, que muchos atribuían sin fundamento a Juan de Mesa, autor del Gran Poder de Sevilla, pues por sus características era de época anterior, de finales del siglo XV o principios del XVI, con facciones algo arcaizantes, propias de la época antes dicha. De pequeño tamaño con cabellera natural, con corona metálica, de plata, que se conserva en domicilio particular, todo recuerda al gótico tardío o al incipiente barroco, por tanto de Juan de Mesa no puede ser, porque este imaginero es del siglo XVII.
Desde principios del siglo XX hasta 1.936, la Cofradía de Ntro. Padre Jesús Nazareno realizaba su estación de penitencia el Viernes Santo. Como la Hermandad no tenía Virgen, el Cristo en su salida era acompañado independientemente por la Virgen de los Dolores, además de una imagen de San Juan Evangelista, que era custodiada por Dña. Josefina Montenegro Acosta.
Procesionaban en el siguiente orden: en primer lugar San Juan Evangelista en una pequeña parihuela, sin acompañamiento; en segundo lugar, tras la Cruz Parroquial con la manga de color negra y dos ciriales, la Virgen de los Dolores que procesionaba sobre un palio negro, siendo acompañada por hermanos y devotos con cirios. A continuación el paso del Señor, de pequeñas proporciones portaba la imagen del Nazareno, vestía túnica morada bordada en oro (túnica con la que hoy en día procesiona el Nazareno, tras pasar los bordados a un nuevo terciopelo), era acompañado por nazarenos con cirios y escoltado por dos parejas de la Guardia Civil de gala, con los fusiles para abajo y el tricornio puesto en la espalda. Tras el paso del Señor iban la autoridad eclesiástica y el Ayuntamiento, y cerrando el cortejo la Banda de Música Municipal.
Los pasos eran portados a hombros por cargadores (según testimonios de personas mayores).
Tras el paso de la Virgen iban la autoridad eclesiástica y el Ayuntamiento, y cerrando el cortejo la Banda de Música Municipal.
A principios de los años veinte, se fusionan la Hermandad del Santísimo Sacramento y la Cofradía de Ntro. Padre Jesús Nazareno en una sola, para beneficio y prosperidad de ambas corporaciones. Con esta refundación y fusión la Hermandad adquiere el carácter sacramental.
Debido a los acontecimientos de 1.936, desapareció la imagen de Ntro. Padre Jesús Nazareno que estaba en la Iglesia Parroquial de San Bartolomé Apóstol. La imagen del Nazareno se encontraba al culto en la capilla de la Hermandad, situada en la nave lateral izquierda, junto al Altar Mayor, en un magnífico retablo dorado
Tanto las Imágenes como los objetos de cultos, documentación, y casi todos los enseres son vandálicamente profanados y destrozados, hasta el punto de que arrastraron la imagen del Nazareno por la calle Sevilla.
Fuente: Revista Nazareno y Dolores
1 comentario:
Qué capullás más grandes se hicieron en el 36. Se perdieron por aquella época muchas imágenes importantes en cuanto a devoción y arte se refiere.
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